sábado, 14 de junio de 2008

Miento

Pensando en tonterías, como todos los días. En verdad, más que nada este último mes que no he podido ni estudiar en paz. He cerrado mis ojos intentando recordar...recordarme a mi y a mi inmaculado modo de vida...al final no encontré mucho de lo que una vez fui, una vez, hace mucho tiempo, en un reino muy muy lejano...en mi propio cuento.

Ese último post me trajo problemas. Miento, no son problemas, solo trajo...cosas, inesperadas, graciosas, irremediablemente cómicas aunque sea con un buen toque de lástima. Al final no era todo verdad. Miento, era verdad, una verdad subversiva que deseaba salir así sea matizada y oculta en una desesperación no común en mi.

Vivir una vida sin muchas emociones no fue del todo un paraiso, tampoco una perdida de tiempo. Me evité problemas, peleas, disgustos...incluso por medio del razonamiento controlé mis sentimientos en más de una ocasión...que bueno era vivir sin problemas.

Las cosas pasaron sin mayor relevancia por un buen tiempo. Anhelo esos tiempo...¿anhelo esos tiempos? Miento, porque si fuera verdad entonces lo que puse en el post anterior sería una vago y patético intento de mentira.

No lo negaré, intenté volver a eso, a la "buena vida", creo que todos a veces pensamos que alguna parte de nuestro pasado fue mejor, al menos por un momento...pero lo hacemos. Horas de terapia con Korn y Velvet Revolver intentaron apagar algo que poéticamente sería un fuego, clínicamente un delirio, psicológicamente un trauma (trauma como hecho que te marca)...al final...ni nombre propio le pude poner.

En vano fue intentar cortar relaciones con algo que era más tuyo que mio, quizás aún lo es. Si lo que quería era alejarte pues ya lo conseguí o eso parece. "Si la amas, dejala ir" escuché en Shrek 2 hace tiempo, caray...me doy cuenta que tan idiota puedo llegar a ser, porque no me siento mejor después de haberlo hecho, es más, pasó lo contrario.

Ya no me sentaré en medio de una sala inmutable, sin emociones, como un observador. Ya no callaré a un belicoso corazón por medio del razonamiento y el disernimiento. Algún día soñé ser ese anti-heroe sin emociones y gallardo. No me arrepiento de no haber llegado a ese climax. Creo que fue mejor. Solo me arrepiento de lo último, de dejar pasar lo que quizás hubiera complementado estas ganas irreprensibles de vivir y sentir como no lo hice durante años. Ahora son solo eso...ganas...que se exparsen, dispersan y luego pierden en el ambiente, sin receptor, sin destinatario, solo porque no quise que lo haya...miento, fuesolo porque cometí la estupidez de decir que eso queria

martes, 3 de junio de 2008

Por una petición

Ayer escribí esto, gracias a la insipiración de una buena amiga. No quería publicarlo, me da vergüenza siquiera leerlo. Pero creo que se lo debo, me pide que ponga algo que gracias a ella escribí...

Ya no sé que pensar, que sentir, que decir…que decirte, es más, ni siquiera creo que me vayas a escuchar, que me prestes atención, no como yo a ti, ¿como podrías? A alguien como yo…solo como yo.

Ortografía? Caligrafía? ¡Ya sé que no estoy cerrando los malditos signos de interrogación! No me importa mucho, ya no me importan muchas cosas.

No diré tu nombre, no me atrevo, con solo pensarte creo que ya aspiro a algo muy alto, pero no puedo dejar de pensar y no puedes ser tan cruel de quitarme lo único tuyo que me queda.

Recuerdo cuando todo era hablar tonterías, reír sin que importara nada porque…en serio, hablando nada importaba, solo reír y ser felices. ¿Qué nos pasó? Yo te diré que nos pasó, dejé de reír, no porque me cansara de ti o tus bromas, sino porque no quería solo seguir riendo. Pobre tonto, siendo un errante busqué a una princesa, sin tener más que ofrecer que lo que traigo aquí. Pasé de molestarte a decirte que te quería, de reírme a carcajadas ahora mi sonrisa es tonta, perdida. ¿Por qué tenía que enamorarme? ¿Por qué de ti que eres tan perfecta, tan…tú?

Han pasado meses, mis ojos que fueron inexpresivos por tanto dolor ahora brillan un poco. Si, un poquito, es alentador a veces. Solo hasta que vuelvo a mi realidad. Solo hasta que te veo. Si, te veo. ¿Distraído yo? Acepto que lo era, no veía a nadie así pasara a mi lado; mas ahora no puedo y no sé si te darás cuenta. Aunque no quiera, aún involuntariamente mis ojos te buscan, solo te quieren ver…solo te quieren…pero el resto de mi ser quiere protegerte…de mi.

¿Por qué tomaste mi mano? Ahora estoy más enfermo que de costumbre. No, enfermo no, a menos de que llorar por la noche y sentir que mi corazón reventará al verte sea enfermedad, solo entonces estaré enfermo. Me hago ilusiones, tontas ilusiones y tonto yo que pude haber tomado más de la cuenta para no recordar nada, el alcohol me ahorraría muchos sueños…mucho dolor, pero no recordaría que al menos por unos minutos eras mía y solo mía. Nadie te sostenía, solo yo y si hiciera falta no te hubiera soltado jamás. Pero me soltaste y ahora no quiero otra cosa que recordarte así…solo mía, aunque no sea otra cosa que una estúpida esperanza, quiero ser estúpido si con eso podré acercarme a ti, aunque sea en un sueño…en mi sueño. ¡Por qué tomaste mi mano! Solo por eso estoy así ¿Por qué lo hiciste? Tengo vergüenza de preguntar, así como de decir la verdad, que aún Abel puede perder la cabeza por alguien.

No sabes cuantas veces he recordado ese momento donde sin saber por qué tomaste mi mano con la tuya. ¿Diez? ¿Cien? ¿Mil? ¿Importa? ¿Te importa? No lo sé y es patético que yo piense en esto. Mi enorme ego no soporta tal humillación y por eso ahora está encerrado en mi armario y no saldrá por un buen rato.

Ahora mis ojos son indiferentes a ti y cada día ese pequeño brillo que obtuvieron va desapareciendo. No sabes las ganas que tengo que abrazarte, de darte un beso…aunque sea en la frente solo por hacerlo, darte un regalo sin motivo, solo porque es miércoles, solo porque te puedo ver. Pero estoy callado, estoy perdiendo mis emociones para protegerte de mí, para que no sufras, aunque para eso yo me tenga que ir. ¿Lo correcto? ¿Lo que tú quieres? No sé, no sé mucho en verdad y hay cosas que prefiero no saber, porque así duele menos, porque así no me da miedo.

Cada mañana me pregunto si te veré y mientras camino canto esa canción que tanto te gustó cuando me pediste el nombre y la escuchaste tú también. Mi familia sabe que algo me pasa, el eterno sonriente ahora anda pensativo, ya no ríe sino que habla con ternura, su hogar esta en silencio, al igual que su alma y sus ganas de vivir. Incluso a Dios le grité: ¡La amo! ¡Te juro que la amo! Y ahora te dejo ir, ahora que más cerca estoy, más me alejo. ¿Quién soy yo? Solo un vagabundo, solo un miserable tonto que no puede dar más que su vida. Tú mereces algo mejor, yo seguiré allí haciéndote reír, alegrándome cada vez que te arranque una risa, poniéndome celoso cuando te vea con otro, perdiendo mis emociones para que estas no te alcancen. Por tu seguridad, solo por eso me voy, por tu seguridad…

Ahora lloro a veces, es un avance para alguien que ya no lloraba nunca, me conmuevo y veo el cielo gris de Lima, pero a mi se me hace azul, es gris para el resto, para mi no. ¿Qué puedo decirte para terminar? ¿Gracias? ¿Te quiero? ¿Te amo? ¿Qué quisieras escuchar? Ojala contestaras, ojala lo dijeras. ¡Contesta! Solo dos palabras y sería feliz, si quieres decir más te escucharía, te prestaría atención así no quisieras, así solo pensaras, leería tus pensamientos en tus ojos. Perdí mi orgullo, mi vergüenza, mi cordura y medio corazón, tú no lo sabes, no deberías saberlo, ya solo me queda un poco de humanidad y te la regalaré, te la daré en una caja y tú la cuidaras, yo seguiré errando, para cuidarte, para que seas feliz. Porque… ¿Quién soy yo? Soy un tonto…no, un sonso…no, una galleta…si, una galleta…que apuntó muy alto…y así acabe sufriendo…no buscará otra forma de apuntar…porque no quiere otra...no podría hacerlo...